Soy una persona impaciente. Me desespera mucho esperar. En Campeche la impuntualidad forma parte de la cultura. He llevado y me espera una vida muy difícil. La “hora campechana”, que tan a broma hemos adoptado, requiere citarse a una hora específica y llegar mínimo media hora retrasado, si bien nos va.
El tiempo es una medida relativa en una ciudad muy pequeña. Una ciudad dónde no pasa nada, donde todos nos conocemos y las distancias son cortas comparadas con el resto de la República. Entonces, ¿Qué origina esa impuntualidad? Es la irresponsabilidad y la falta de conciencia. A la gente le importa poco la vida de los demás y no valora el tiempo de las pocas personas que acostumbramos ser puntuales. Alguna vez escuché la frase “La puntualidad va en relación directa con el grado de interés de la persona”. Falso, porque incluso a citas de gran interés o divertidas llegan tarde.
En clase de maestría, al determinar los valores de una compañía, se armó la discusión con una persona que defendía que la puntualidad no tiene relación con la responsabilidad. Le traté de explicar que es una irresponsabilidad y falta de respeto llegar tarde a cualquier cita (laboral, social, académica). Si me hacen esperar es un tiempo muerto, que podría estar haciendo algo más productivo. Si yo tuve la conciencia de estar listo y llegar a una hora pactada era justo recibir lo mismo. “En Dinamarca y Holanda es distinto” defendía la fulana. Lo que nunca explicó es por qué en Dinamarca eran impuntuales cómo nosotros. Yo más bien creo que defendió la impuntualidad porque siempre llega tarde a todas las clases.
Me siento fuera de lugar. Al hablar de puntualidad todos se ponen en mi contra y me tachan demamón exagerado. Afortunadamente mis amistades y amigos me han aceptado y entendido que si me citan a una hora deben llegar a tiempo, si no quieren que me vaya o cancele toda la reunión pasado 10-15 min de espera.
Entiendo que hay contingencias: tráfico, desperfectos en el auto, accidentes, pero no-me-jodan-la-madre. No se puede vivir siempre así.
El tiempo es una medida relativa en una ciudad muy pequeña. Una ciudad dónde no pasa nada, donde todos nos conocemos y las distancias son cortas comparadas con el resto de la República. Entonces, ¿Qué origina esa impuntualidad? Es la irresponsabilidad y la falta de conciencia. A la gente le importa poco la vida de los demás y no valora el tiempo de las pocas personas que acostumbramos ser puntuales. Alguna vez escuché la frase “La puntualidad va en relación directa con el grado de interés de la persona”. Falso, porque incluso a citas de gran interés o divertidas llegan tarde.
En clase de maestría, al determinar los valores de una compañía, se armó la discusión con una persona que defendía que la puntualidad no tiene relación con la responsabilidad. Le traté de explicar que es una irresponsabilidad y falta de respeto llegar tarde a cualquier cita (laboral, social, académica). Si me hacen esperar es un tiempo muerto, que podría estar haciendo algo más productivo. Si yo tuve la conciencia de estar listo y llegar a una hora pactada era justo recibir lo mismo. “En Dinamarca y Holanda es distinto” defendía la fulana. Lo que nunca explicó es por qué en Dinamarca eran impuntuales cómo nosotros. Yo más bien creo que defendió la impuntualidad porque siempre llega tarde a todas las clases.
Me siento fuera de lugar. Al hablar de puntualidad todos se ponen en mi contra y me tachan de
Entiendo que hay contingencias: tráfico, desperfectos en el auto, accidentes, pero no-me-jodan-la-madre. No se puede vivir siempre así.
1 comentario:
La impuntualidad es el resultado de la conchudez, de falta de interés y el vicio de llegar siempre tarde... yo elevo la puntualidad a un VALOR HUMANO.. xq detrás de todo eso hay mas: orden, organización, planeación, interés, respeto.. una persona impuntual para mi no es confiable.. SIN PRETEXTOS!
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